Si estás planeando una excursión por Álava, Añana es un destino que no puedes dejar pasar. Este encantador rincón ofrece una combinación perfecta de naturaleza, cultura y una vibrante escena de comercio rural que hará de tu visita una experiencia inolvidable.
Un paseo por las Salinas de Añana
Comienza tu día explorando las históricas Salinas de Añana, un paisaje único donde podrás aprender sobre la tradicional producción de sal. Las visitas guiadas te sumergirán en la historia y te permitirán ver de cerca las terrazas de evaporación, un espectáculo visual impresionante. Lleva un pedazo de Añana contigo visitando comercios locales de sal gourmet, perfecto como regalo y recuerdo de tu estancia.
Naturaleza en estado puro
A pocos kilómetros, el Parque Natural de Valderejo es un paraíso para los excursionistas. Con senderos bien señalizados, este parque ofrece rutas para todos los niveles, donde podrás disfrutar de vistas panorámicas, cascadas y una rica biodiversidad. Si necesitas abastecerte para tu excursión, en Espejo, Kuartango o Nanclares puedes encontrar supermercados y farmacias que te ofrecen todo lo necesario, desde alimentos frescos hasta productos de primera necesidad.
Comercio Local: Un Tesoro Escondido
Después de una mañana activa, es momento de descubrir el encanto del comercio local de Añana. Las calles de este pueblo, están salpicadas de tiendas que reflejan la autenticidad y el sabor de la región. El olor a pan recién horneado, la calidad de los productos km 0, el estilo de las tiendas textiles y la cercanía de los comerciantes te hará no querer salir de este lugar.
Añana no solo te enamorará con sus paisajes y cultura, sino también con la autenticidad de su comercio rural.
